Yoga
El yoga es una disciplina milenaria.
Cada uno de nosotros se acerca al Yoga por diferentes razones: disminuir la ansiedad, reducir el estrés, mejorar la flexibilidad, aliviar dolores de espalda, mejorar el sueño, mantener el peso, aprender técnicas de respiración, etc. Todas y cada una de estas razones son válidas y, de hecho, el Yoga siempre nos da lo que necesitamos y algo más: un conocimiento profundo acerca de nosotros mismos.
La práctica del Yoga se convierte, paso a paso, en un espacio de tiempo que te dedicas a ti mismo.
La calidad de este contacto con tu propia persona te va otorgando beneficios inmediatos, como la relajación integral que te invade tras una buena sesión, y otros beneficios a medio-largo plazo igualmente poderosos:
· Reducción de estrés y ansiedad
· Mejora de la capacidad de concentración
· Mejora de la capacidad respiratoria
· Aumento del rango del movimiento corporal
· Capacidad para gestionar pacíficamente los conflictos
· Amplitud de Conciencia
¿Qué puedes esperar de una sesión de yoga?
En una clase “regular” de Yoga comenzamos con unos instantes de silencio. Este pequeño espacio es necesario para que hagamos un alto y tomemos conciencia de que estamos “aquí y ahora” y que va a comenzar nuestra clase de yoga. Seguimos con varios vinyasas sencillos para sincronizar respiración y movimiento y a partir de ahí realizamos algunos(Saludo al Sol) y se continúa con la secuencia de ásanas (posturas). Finalmente, dependiendo de la intensidad de la sesión, se propone un tiempo de descanso en savasana y una meditación final.
![]() |
![]() |